La inspiración llegó a mi el día que te conocí,
manchas de color, llegaron a mi cabeza
con ganas de impregnarlas de tu belleza.
Mezclas de colores, y brillos de pinceladas,
inundaron mis lienzos de tus lindas miradas.
Las musas, cantaron en mis oídos,
canciones que me hicieron creer en los amores,
maravillosas voces, que aparecieron para inspirarme,
grandes diosas, que dan vida a las flores.
Ideas infinitas, en las que tú estás,
millones de miradas, recorren mi alma,
pensando en cómo escribirte al alba.
Tan solo una cosa deseo me inspiren,
poder amarte y no odiarte,
poder tenerte y no perderte,
tan solo una inspiración,
el conquistarte y valorarte.
La musa se fue..
pero dejó mi alma impregnada de mis deseos,
quedará dentro de mí,
agradeciendo su labor,
ya que no hay mejor deseo
que el ser amado,
y por tu amor ser liberado.
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